11 información más que útil para aquellos que consideran la terapia

Decidir hacer terapia aún conlleva un gran estigma social: uno tiende a pensar que está en el fondo necesitando ayuda y será visto por amigos y familiares como loco o fuera de control cuando de hecho El proceso terapéutico se recomienda para cualquier persona, tenga o no algún tipo de enfermedad mental.

The Huffington Post seleccionó algunos consejos dados por Greg Kushnick, un psicólogo de Manhattan, sobre comenzar la terapia; así que si tiene curiosidad sobre esto o está considerando probar esta característica, tenga en cuenta lo siguiente:

1 - Una vez que comiences a hablar, las cosas mejorarán

Una vez que esté en el sofá, frente al terapeuta, la forma en que habla será: puede ser incómodo en los primeros segundos, pero una vez que se dé cuenta de que esa persona simplemente no está juzgando su discurso moralmente o despectivo, lo que vendrá será una gran sensación de alivio.

En general, el paciente habla sobre temas que ha estado ocultando durante mucho tiempo, y poder abordarlos directamente es simplemente liberador. Este ejercicio tiene muchas más ganancias emocionales de lo que piensas.

2 - ¿No estás seguro de qué decir exactamente? Entonces escribe

Está bien si cree que se sentirá avergonzado en la primera cita: hay personas que tienen más dificultades para hablar con usted, especialmente con un extraño, y eso no es un problema. Si es así, pegue y escriba los temas que desea cubrir. Incluso puede tomar todo en papel el día de la cita, seguramente el profesional elegido sabrá qué hacer.

Consejo 3: Tal vez su terapeuta le preguntará por qué va a terapia

Puede que no lo parezca, pero esta es una pregunta que puede hacer que los que no estén preparados para mirar al espacio por unos minutos. Luego, realice un autoanálisis y tenga en cuenta lo que le está haciendo buscar ayuda terapéutica: podría ser cualquier cosa: conflictos familiares, dudas existenciales, problemas en el trabajo, dificultades de interacción social, quejas de autoimagen, traumas o simplemente conocimiento de sí mismo.

4 - La vida corre, ya sabes, por eso es genial hacer terapia

No tiene que tener grandes problemas internos para resolver si desea recibir terapia. De hecho, la terapia es muy útil para las personas que tienen una vida laboral ocupada, que viven en reuniones importantes, que trabajan horas extras todos los días, que estudian, que cuidan la casa, sus hijos, etc. El estrés diario también es algo que debe tratarse con un terapeuta cuando sea necesario.

Entonces ... Es muy posible que algunos de tus demonios internos no puedan resolverse sin la ayuda de un profesional.

Es bastante común pensar en los problemas psicológicos como algo que podemos resolver sin la ayuda de nadie, siempre que tengamos buena voluntad. Sin rodeos: esto es una mentira. El terapeuta es un profesional capacitado para ayudar con este proceso y, por extraño que parezca, es muy posible que una persona a menudo ni siquiera sepa cuál es el problema con ella. Luego, con ayuda profesional, termina profundizando en su propia conciencia y gradualmente coloca las pequeñas piezas en su lugar.

La terapia proporciona una serie de cambios, pero muchos de ellos tardan en suceder, lo que es una prueba más de que trabajar sin ayuda es realmente difícil. Recuerde siempre que una de las funciones de la terapia es crear nuevas perspectivas, lo cual es bastante difícil de hacer sin ninguna intervención.

6 - Es difícil ver los beneficios prácticos de la terapia

Esto es precisamente por qué tantas personas dicen que el proceso terapéutico es innecesario o ineficiente. Este razonamiento es fácil de entender, después de todo es difícil entender que un extraño tiene la capacidad de ayudar a resolver problemas muy íntimos. Sin embargo, la verdad es que los terapeutas están capacitados para realizar intervenciones en todos los casos y ayudar a sus pacientes a resolver problemas. Dales una oportunidad y demuéstralo desde su propia experiencia.

7 - Existen diferentes tipos de terapeutas y terapias.

Aún así, muchos de estos profesionales tienen más de un tipo de enfoque: los psicoanalistas tienden a hablar menos que los terapeutas que trabajan en el tema cognitivo-conductual, por ejemplo. Cada tipo de terapia es ideal para diferentes casos, y debe discutir esto con su terapeuta hasta que encuentre un profesional cuyo método de análisis e interacción sea el adecuado para usted.

De todos modos, vale la pena saber que la primera sesión siempre es más tranquila, independientemente del tipo de terapia y terapeuta, precisamente para que este profesional pueda hacer un buen análisis inicial y luego planificar sus estrategias y preguntas de intervención. No juzgue la calidad de todo el tratamiento en función del primer día de terapia.

No pienses que el terapeuta te sacará cosas

El objetivo de este profesional no es pinchar sus heridas hasta que hable de ellas. De hecho, el terapeuta reconoce las señales de su cuerpo de que algunos temas son hablables o no, a veces solo toma un poco de tiempo para comenzar. De cualquier manera, puede estar seguro: no estará obligado a nada.

9 - Los terapeutas modernos tienden a interactuar

No tenga miedo: hoy es muy difícil que esté tratando con un terapeuta que se para como un poste. Estos profesionales ahora interactúan cada vez más con sus pacientes, y la consulta termina pareciéndose más a un diálogo que a un monólogo, lo cual es muy positivo, incluso porque las reacciones de la persona a la que se está sometiendo a tratamiento muestran que Ella tiene empatía por lo que sientes, y eso siempre es bueno.

10 - La terapia no es solo en la oficina

Del mismo modo que comprende mejor el tema que estudia en el aula cuando hace esa revisión básica en casa, la terapia es lo mismo: no sirve de nada salir de la sala del terapeuta y dejar todos sus problemas y preguntas allí. Además de decir lo que dices allí, debes pensar en lo que se dijo cuando saliste de la oficina. La reflexión es fundamental.

11 - Estar dispuesto a cambiar, incluso si involucra problemas dolorosos, es lo que hace que la terapia realmente funcione.

No es bueno que descubras el origen de tus miedos, traumas y dificultades si no estás dispuesto a hacer pequeños y grandes cambios en tu forma de actuar: son las diferencias en las actitudes y los comportamientos los que solidifican las diferencias en los pensamientos que puedes tener.

Esta es la razón por la cual las personas que son forzadas a la terapia y resistentes a ella a menudo no se desempeñan bien, por ejemplo. El secreto siempre es pensar en la terapia como una forma de autoconocimiento, algo extremadamente necesario para cualquiera que busque evolución personal, sea lo que sea.

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¿Qué opinas sobre la terapia? ¿Alguna vez has hecho o quieres hacerlo? Siéntate en el sofá y cuéntanos todo en el espacio de comentarios.