¡La cerveza no es vino! Mira qué hacer para que ella no envejezca tan rápido

(Fuente de la imagen: Thinkstock)

La gente de Gizmodo ha escrito un interesante artículo para un fanático de la cerveza, en el que dan algunos consejos para evitar que su bebida favorita se oxide y tenga ese sabor desagradable característico.

Según el artículo, la vieja creencia de que sacar una cerveza del congelador, dejarla calentar y volver a ponerla en el refrigerador, de hecho, no hace que la bebida se oxida. La verdadera culpa de que su pequeña cerveza tenga ese pequeño sabor extraño no es el calor o la variación de temperatura, sino la exposición a la luz.

Lúpulo

Según Malcolm D. Forbes, investigador de la Universidad de Carolina del Norte, el sabor característico de la cerveza vieja, que describe como "sabor a zorrillo", se debe a la sensibilidad del lúpulo a la luz. Este compuesto, utilizado para dar sabor a la bebida, es lo que le da a la cerveza ese sabor amargo y evita la proliferación de bacterias.

Sin embargo, el lúpulo es muy sensible a la luz, y cuando la cerveza se expone a la acción de los rayos ultravioleta, este elemento sufre una reacción química que conduce a la liberación de radicales libres, lo que produce ese mal sabor. Por lo tanto, las cervezas que contienen menos lúpulo, generalmente las más livianas y livianas, también son las menos propensas a oxidarse.

¿Que hacer?

(Fuente de la imagen: Thinkstock)

Si el gran problema es ligero, lo mejor que puede hacer es almacenar su cerveza correctamente. Entonces, si no desea mantener su bebida en el refrigerador, que es el mejor lugar para ella, definitivamente, guárdela en un lugar bien ventilado y protegido de la luz.

Además, las cervezas que se venden en esas botellas de vidrio ámbar más oscuro se ven mejor que las que se venden en botellas de vidrio verde y mucho mejor que las bebidas que se venden en botellas transparentes.

Procedencia

Además de prestar atención a cómo almacenar sus cervezas en casa, es bueno vigilar cómo se almacenan donde generalmente las compra. No tiene sentido almacenar sus pequeñas bebidas de la manera correcta si en el mercado están expuestas en esos refrigeradores iluminados o cerca de fuentes de luz directa.

Idealmente, las botellas deben protegerse en cajas de cartón o fuera de la luz. Otra opción es comprar cervezas que vienen en latas, que mantienen la bebida sellada por dentro y completamente protegida de la luz.

¡La cerveza no es vino!

(Fuente de la imagen: Thinkstock)

Otra cosa a tener en cuenta es que la cerveza no es como el vino, por lo que no debe mantenerse envejeciendo. Aunque no se echa a perder con el tiempo, dejarlo olvidado en el armario afectará su sabor. Para retrasar un poco este proceso, mantén fresca a tu rubia y no la hagas esperar demasiado. ¡Y disfruta con moderación!

Fuentes: Gizmodo, Universidad de Carolina del Norte y profesor Beer