Conozca las versiones reales de criaturas legendarias y ficticias.

¿Hasta qué punto son criaturas ficticias y seres inventos de mentes creativas? Nuestros antepasados ​​buscaron justificar la creación de mitos y dioses a través de experiencias e historias que presenciaron, sean ciertas o no. Pero, ¿es correcto decir que cada leyenda proviene de algo real? A través de esta pregunta, presentamos aquí una lista de criaturas y seres reales que se parecen, en cierto modo, a cuentos ancestrales.

Vlad Tepes vs Conde Drácula

El conde Drácula es un personaje ficticio de Bram Stoker. La obra del siglo XIX eternizó al vampiro más conocido de la literatura y fue la puerta de entrada a la extensión del universo chupasangre. Se cree que su leyenda fue inspirada por el rumano Vlad Tepes, hijo de Dracul, un príncipe rumano que drenó la sangre de las víctimas después de empalarlas.

(Fuente: Divulgación)

Flamencos x Fénix

Los científicos han descubierto que el fénix puede haberse originado de la existencia de un flamenco en particular, que se alimenta de espirolina, una sustancia derivada de los lagos volcánicos de la Gran Grieta. Además, el ave se reproducía en el lago Lengay, en aguas que alcanzaron temperaturas superiores a 60 ° C, con sus polluelos nacidos bañados en polvo gris, dando lugar a la idea de "levantarse de las cenizas", observada por alguien que siguió esta narración.

Gigantopithecus x Bigfoot

Según la teoría evolutiva, gigantopithecus, el simio más grande que haya existido, con un peso de aproximadamente 200 kg a 500 kg en la edad adulta, sería "ancestral" para Bigfoot, ya que se parecía mucho al tamaño y las características humanas, con una dentición similar. . Como el mono ya estaba extinto, el "pariente" aún vivo de Bigfoot sería, en teoría, el orangután. Se estima que Gigantopithecus se ha extinguido porque no puede adaptarse a los cambios ambientales y la dieta.

Cefalópodo Triásico Gigante x Kraken

En un estudio realizado por el paleontólogo Mark McMenamin, se planteó la posibilidad de un Kraken real durante el período Triásico. La criatura, conocida como uno de los reyes oceánicos y las devastadoras embarcaciones y tierras, ya no puede considerarse un mito sino un ser en peligro de extinción. A pesar de los desacuerdos entre Mark y sus compañeros de equipo, el paleontólogo se mantiene firme en la idea de que los restos de un enorme ictiosaurio pueden haber sido restos de una vida gigante en los mares, un cefalópodo que "jugó" con su comida.

(Fuente: Divulgación)