El descubrimiento de fósiles podría cambiar el mapa actual de la evolución humana

Según The Verge, un equipo internacional de investigadores publicará el viernes varios estudios que pueden reescribir el mapa de la evolución humana. La investigación describe los hallazgos del equipo en Australopithecus sediba, una especie prehumana que habitó nuestro planeta hace 2 millones de años.

Según la forma en que estas criaturas caminaron, masticaron y se movieron, los científicos creen que los humanos son descendientes directos de A. sediba, en una teoría alternativa al hecho de que nuestro ancestro más probable es el Homo habilis, que surgió 100, 000 años después. de estos prehumanos. Además, la combinación de características humanas y primates de A. sediba también apuntan a una línea evolutiva diferente.

Evidencia prehumana

Fuente de la imagen: Reproducción / The Verge

Un análisis de la estructura dental de A. sediba reveló varias similitudes con Homo sp. Por otro lado, la misma evaluación también mostró disparidades con respecto a A. afarensis, Un tipo de homínido que incluye el famoso esqueleto de Lucy, descubierto en África Oriental en 1974 y comúnmente aceptado como el antepasado que dio origen a todos los prehumanos.

Además de la estructura dental, los investigadores han encontrado otros rastros que parecen componer mejor este mosaico evolutivo. Tanto el tórax, la columna vertebral y la mandíbula de A. sediba muestran características sorprendentemente humanas, y aunque los brazos y las manos tienen cualidades ideales para trepar a los árboles, las extremidades inferiores muestran signos de ser utilizados para movimientos bípedos.

Otro rastro importante es la presencia de dedos gordos alargados, lo que sugiere que, como los primeros humanos, A. sediba probablemente los usó para sostener herramientas y otros objetos. Según los investigadores, sin importar la estructura evaluada, de la cabeza a los pies, los esqueletos muestran una clara evidencia de la evolución de la transición de estas criaturas al género Homo sp., más que cualquier otra especie de australopiteco jamás estudiada.

Descubrimiento accidental

Fuente de la imagen: Reproducción / Duke University

Los huesos de A. sediba fueron descubiertos por casualidad en 2008 en una cueva en Sudáfrica, y desde entonces han sido estudiados, y los resultados sorprendentes deberían constituir el estudio más completo de una especie prehumana jamás realizada. Estas criaturas tenían poco más de cuatro pies de alto y cerebros pequeños que, aunque similares a los de los primates, tenían una forma y organización más parecida a la humana.

Los paleontólogos admiten que los hallazgos están abiertos a nuevas interpretaciones, ya que el registro fósil sigue siendo incompleto. Sin embargo, también afirman que la evidencia encontrada sugiere fuertemente que si A. sediba no es el antepasado directo del género Homo sp., ciertamente eran un "pariente cercano" de estos antepasados.

Controversias

Fuente de la imagen: Reproducción / Duke University

No es sorprendente que ya haya una avalancha de contestación sobre los resultados de la investigación, y muchos afirman que A. sediba sería demasiado joven para haber sido ancestros humanos, citando el descubrimiento de fósiles muy malcriados y dudosamente identificados de Homo. habilis con 2.3 millones de años.

Y es precisamente la falta de fósiles bien conservados de otras especies lo que hace que el trabajo de comparar criaturas sea tan complicado. Esto hace que el curso del mapa evolutivo de los seres humanos aún sea incierto, y aunque A. sediba abre una nueva posibilidad gigantesca, esta discusión continuará envuelta en una densa nube de especulación.