La experiencia de maquillaje hace que la piel del reportero sea 10 años mayor

Es importante desmaquillarse antes de acostarse. De lo contrario, su piel puede volverse seca o irritada. Pero según un artículo en el Daily Mail, una encuesta confirmó que un tercio de las mujeres duerme con maquillaje al menos dos veces por semana.

Por lo tanto, la reportera Anna Pursglove decidió experimentar consigo misma: ¿qué pasaría con la piel de una persona que se quedó 30 días sin quitarse el maquillaje? Para esto aplicó diariamente lápiz, rímel, rubor y brillo. El resultado, como se esperaba, no fue el mejor.

Después de la primera noche, se sorprendió por la cantidad de suciedad que quedaba en la almohada, y sus ojos estaban ligeramente irritados, con picazón y sus pestañas azotaron. Dos días después, la piel estaba lo suficientemente seca y aparecieron manchas cerca de los ojos. Se sentía como si usara una máscara, e incluso la aplicación de crema hidratante no alivió ese efecto.

Resultado desagradable

Cuando se quitó el rímel acumulado, se arrancaron muchas pestañas involuntariamente y alrededor del décimo día una sorpresa desagradable: Pursglove se despertó con un ojo izquierdo hinchado que apenas podía abrir. Según el oftalmólogo que la atendió, el problema fue causado por el exceso de rímel, que finalmente entró en el ojo. Afortunadamente, el ojo reaccionó a la inflamación y volvió a la normalidad según lo predicho por el médico.

Con el tiempo, síntomas más preocupantes: labios deshidratados con grietas en las comisuras de la boca. Al final del período de prueba, un experto concluyó que la piel de Pursglove estaba un 20% más seca que antes. Y no fue solo la superficie, ya que otras capas de la piel también se vieron afectadas.

Las arrugas existentes se volvieron más rojas y profundas y los poros eran aproximadamente un 5% más grandes, gracias a la reducción de la elasticidad de la piel. También se pueden ver manchas rojas en muchas partes de la cara.

Según los expertos que asistieron al reportero, su piel era aproximadamente una década más vieja en comparación con la situación anterior al experimento. El principal problema, según la historia, fue la acumulación de contaminantes debido al exceso de maquillaje, que daña el colágeno y la elastina, componentes esenciales para la apariencia juvenil de la piel.