Los microbios ancestrales pueden haber creado la mayor reserva de oro del mundo

Casi la mitad del oro que se ha extraído en el mundo proviene de un lugar llamado Witwatersrand Basin, una profunda capa de rocas salpicadas de metales preciosos en Sudáfrica.

Según un estudio realizado por el científico suizo Christoph A. Heinrich, publicado recientemente en la revista Nature Geoscience, la explicación de la acumulación de tanto oro en un lugar es la lluvia ácida que azotó nuestro planeta hace 3.000 millones de años. La presencia de microbios en la región.

Deja que la lluvia venga

Antes de que la Tierra pasara el Gran Evento de Oxidación, cuando los microbios liberaron oxígeno a la atmósfera, había muchos otros químicos en el medio ambiente. Uno era el azufre, que, cuando reaccionaba con el agua, formaba sulfuro de hidrógeno, que precipitaba en lluvia ácida.

Cuando esta sustancia cayó junto con la lluvia en los depósitos de oro de las montañas Kaapvaal Craton en la parte noreste del país, reaccionó con el mineral y creó moléculas de oro solubles en agua. Esto luego siguió la corriente de ríos por la región hacia la cuenca de Witwatersrand, cientos de millas al sur.

La unión hace la fuerza

La teoría de Heinrich es que los microbios que viven en la región eliminarían la solución de oro del agua a través de la ingestión y, cuando murieran, sus cuerpos se acumularían en el fondo de la cuenca. Después de que los microorganismos se descompusieron, solo quedó oro, que se filtró en las capas de roca. El científico suizo basa este escenario en el hecho de que los microbios de hoy pueden reducir el oro de su forma iónica disuelta en agua a la forma sólida del elemento.

Por pequeños que puedan ser individualmente, cuando se reúnen en grandes cantidades, estos seres son lo suficientemente poderosos como para remodelar la forma de las cosas, tal como lo hicieron con la atmósfera. Si no fuera por ellos, no tendríamos el oxígeno para respirar, el elemento más básico para la vida humana en el planeta.