¡Ya no ha terminado! Calendario maya descubierto que oculta el fin del mundo

Sitio arqueológico donde se encontró el calendario (Fuente de la imagen: Reproducción / National Geographic)

Un informe, publicado por Science, dice que un grupo de científicos estadounidenses encontró en Guatemala el calendario maya más antiguo conocido. Data del siglo IX y es un calendario astronómico pintado en las paredes de un complejo residencial de 1.200 años de antigüedad recientemente excavado cerca de la ciudad de Xultún.

El sitio comenzó a ser explorado después de que los saqueadores dejaron expuesta una de sus paredes. Las excavaciones de los arqueólogos revelaron otras tres habitaciones intactas que mostraban pinturas de figuras humanas y columnas verticales con números escritos en jeroglíficos mayas.

Según los científicos, el nuevo calendario es al menos 500 años más antiguo que los otros ya encontrados. Además, este nuevo descubrimiento, afortunadamente, parece creer que el fin del mundo tendrá lugar en diciembre de 2012.

El mundo no termina en 2012

Las inscripciones encontradas describen la existencia de 17 ciclos en el sistema maya, no 13 como se creía anteriormente, lo que significa que el calendario tiene más de 6, 000 años. Eso nos daría varios años de sobra antes de que Doomsday se presente. Uf!

(Fuente de la imagen: Reproducción / National Geographic)

Los cálculos encontrados entre las inscripciones corresponden al ciclo lunar, y los arqueólogos creen que los jeroglíficos pueden estar relacionados con los ciclos de los planetas Mercurio, Marte y probablemente también Venus. Los antiguos mayas usaban tales calendarios para "programar" sus rituales sagrados en las fechas más favorables, como los días en que ocurriría un eclipse, un fenómeno astronómico o un evento mítico.

Aunque los hallazgos son muy importantes desde el punto de vista arqueológico, los científicos aún tienen mucho trabajo por hacer. Hasta ahora solo se ha explorado el 0.1% del complejo y aún es necesario determinar para qué y para quién se utilizaron exactamente las habitaciones.

Fuente: Ciencia y National Geographic.