¿Qué se sabe sobre los métodos que prometen hacernos más inteligentes?

El ser humano es una máquina de insatisfacción, y quizás es precisamente el descontento lo que nos hace evolucionar en algunos aspectos. ¿Cuántas veces has escuchado a alguien decir que el hombre se fue a la luna pero aún no puede desarrollar algo? La verdad es que vivimos con ganas de superarnos a nosotros mismos.

En este sentido, el cerebro humano siempre plantea algunas preguntas: ¿cómo es posible saber tan poco al respecto? ¿Qué funciones realiza el cerebro pero aún se desconocen? ¿Por qué todavía no hemos desarrollado una forma de ser más inteligentes?

Bueno ... Tal vez ya tengamos una respuesta a la última pregunta. No es ahora que los neurocientíficos de todo el mundo estén apostando por estímulos eléctricos para mejorar el rendimiento cerebral y, por lo tanto, ayudar a que las personas sean más inteligentes.

Resultados comprobados

Estudios recientes han confirmado que los estímulos eléctricos o magnéticos pueden marcar la diferencia. Los científicos de Oxford Ruairidh Battleday y Anna-Katherine Brem creen que estos estímulos son, de hecho, la esperanza para quienes buscan una mejora cognitiva, así como es posible que en el futuro podamos tener medicamentos que nos hagan más inteligentes.

Investigadores de la revista Annals of Neurology hablaron recientemente sobre los métodos de estimulación cerebral que ya se comercializan. Recordaron que la estimulación alcanza regiones específicas del cerebro y que, si bien ralentiza algunos procesos cerebrales, en realidad aumenta otros.

Este tipo de estimulación tiene la capacidad de mejorar nuestra memoria, nuestro reconocimiento de patrones, aumentar la atención y la concentración, y mejorar las habilidades matemáticas. Algunos estudios incluso han demostrado que hay mejoras significativas incluso en aspectos del rendimiento deportivo, con la ventaja de disminuir la fatiga post-entrenamiento.

Salud mental

Puede parecer mucha información, pero se sabe poco sobre los beneficios de la estimulación eléctrica del cerebro. En términos de salud mental, por ejemplo, se ha demostrado que este método puede aliviar los síntomas de afecciones como la depresión y la ansiedad. El punto es que se conocen muchos beneficios, pero aún no sabemos si este tipo de estimulación no puede dañar el cerebro de ninguna manera.

El uso de dispositivos que prometen proporcionar estimulación eléctrica al cerebro sin supervisión médica, lo que ya está sucediendo en algunos países, es arriesgado ya que no es posible controlar la región del cerebro que se verá afectada tanto positiva como negativamente.

Además, cuando estas tareas se realizan en el laboratorio, con el seguimiento adecuado, es posible monitorear las actividades cerebrales, incluso porque la actividad realizada en el momento de la estimulación (ver televisión o leer un libro, por ejemplo) interfiere directamente con el resultado de experiencia

Humanos del futuro

El hecho es que ya hay muchos estudios que buscan encontrar una manera de mejorar nuestra inteligencia. Si bien esto suena prometedor y emocionante, debemos entender que estas mismas experiencias pueden tener efectos no tan positivos, especialmente a largo plazo, y aún no se conocen.

Además, hay cuestiones políticas y éticas involucradas: ¿quién tendría derecho a tener información y acceso sobre este tipo de mejora dentro de una sociedad? Quizás aquí esté el lado más futurista de este tipo de experiencia. Solo mediante tales preguntas se puede imaginar que cualquier aplicación práctica de métodos físicos para mejorar la inteligencia humana no se logrará pronto.

¿Te arriesgarías a participar en experimentos que buscan mejorar el rendimiento de tu cerebro? ¿Crees que realmente necesitamos esto? Deja tu opinión en los comentarios!