Pene del futuro: 8 mejoras en la evolución de tu mejor amigo

¿Alguna vez has pensado en un pene con conexión a internet para tener sexo virtual? ¿O un miembro capaz de resistir las numerosas enfermedades de transmisión sexual (ETS)? El sitio IO9, que se especializa en tendencias futuristas para una variedad de cosas, ha enumerado ocho características que puede tener el 'pene del futuro'.

Entre los puntos descritos en el sitio, hay algunos que realmente se predicen en base a estudios científicos y experiencias ya iniciadas. Sin embargo, hay otros que son solo la imaginación de todos los que están interesados ​​en el órgano reproductor masculino, independientemente del propósito. Para estos casos, el autor explica que trató de describir la mejor manera de alcanzar el resultado de la situación actual.

Según el autor, al igual que el cerebro humano, el pene usa solo el 10% de su capacidad (de hecho, esta declaración sobre el cerebro ya se ha eliminado, como puede ver aquí). De todos modos, siga las posibilidades que el "pene cibernético" puede presentar en el futuro.

1. resistencia a las ETS

El pene del futuro no estará totalmente libre de contaminación por enfermedades de transmisión sexual, ya que hay muchas enfermedades y formas de transmisión conocidas. Sin embargo, con los avances tecnológicos, la extremidad, junto con un sistema inmunitario avanzado, puede presentar una gran resistencia y reducir los riesgos de contaminación.

Este proceso ocurriría de la siguiente manera: los biosensores se implantarían en el pene e identificarían la presencia de cuerpos extraños y diferentes patologías, alertando al sistema inmunitario (que también se mejoraría a través del avance tecnológico) para defenderse de los microorganismos responsables de las enfermedades.

Cualquier pene, incluso si está "sobredimensionado" pero contiene sangre que corre por sus venas, será susceptible a la contaminación por enfermedades. Sin embargo, con el advenimiento del pene tecnológico, los riesgos de infección se reducirían considerablemente.

2. Exigir anticonceptivos

Los mecanismos anticonceptivos para los hombres ya están desarrollados y hay alternativas en estudio para proporcionar una mejor calidad de vida a los usuarios. Actualmente, las píldoras desarrolladas son olvidadizas y tienen efectos secundarios debido a la implicación hormonal que conllevan (tanto para hombres como para mujeres). Los procesos como la vasectomía ya son permanentes y no permiten controlar cuándo los espermatozoides pueden o no actuar y fertilizar el óvulo.

Pero con los estudios actuales, se están desarrollando mecanismos de control de la fertilización. Algunos apuntan a bloquear la producción de semen antes de llegar a la uretra y otros apuntan a abolir la capacidad del esperma para penetrar en la célula reproductora femenina.

Además, hay algunos estudios para desarrollar un tipo de "clave genética" cuyo propósito sería activar y desactivar la producción de esperma. El desafío para este proceso es el momento en que el cuerpo vuelve a producir esperma y también las posibles disfunciones hormonales.

3. Fin de los problemas de erección

Actualmente, uno de los problemas más comunes relacionados con el pene es la dificultad de la erección. Los estudios sobre terapia génica, tratamiento farmacéutico, nuevos lanzamientos de medicamentos y medicina regenerativa, como el injerto de nervios, son algunas de las posibilidades en desarrollo. Estas alternativas incluso deben concebirse antes del advenimiento del pene futurista.

En cualquier caso, todas las alternativas posibles actualmente presentan de alguna manera riesgos presentes, efectos secundarios o resultados no tan satisfactorios. Las drogas como el Viagra, por ejemplo, han ayudado mucho, pero causan una erección muy larga y son muy caras.

En este sentido, el pene del futuro puede ayudar mucho si los científicos pueden desarrollar formas para que la extremidad se auto regenere. Otra posibilidad sería que con la edad avanzada, la extremidad recibiría implementos artificiales que reemplacen algunos de los elementos naturales que están causando el problema.

4. Múltiples orgasmos

El punto que evita que los hombres alcancen orgasmos múltiples es el tiempo que el pene está "inactivo" después de una eyaculación. Este proceso se llama Período refractario y, según la edad, puede llevar de minutos a horas antes de que la extremidad pueda volver a erigirse.

Los estudios demuestran que este hecho es proporcionado por el cerebro y no por ningún defecto en el pene en sí. Según los científicos, se libera una gran cantidad de hormonas con una sustancia llamada "prolactina", que inhibe la acción de la "dopamina", responsable de la estimulación sexual.

Para acortar o incluso terminar el Período refractario, la producción sería elementos inhibidores de la prolactina, que contendrían la liberación de esta sustancia automáticamente después del orgasmo. En un futuro ideal, el "pene avanzado" podría estar erecto bajo demanda, cuando su "dueño" lo quisiera o lo creyera necesario.

5. Avance en sensibilidad y orgasmo

Actualmente, los científicos están realizando estudios destinados a llegar a las áreas más remotas del cerebro y, con estos procesos, han podido producir estímulos y excitación en el núcleo accumbens, una de las regiones del órgano directamente responsables de la sensación de placer. Para aumentarlo, junto con la sensibilidad y mejorar la intensidad del orgasmo, la salida posiblemente será el avance en la capacidad de esta y otras regiones del cerebro para responder a la información sensorial enviada por el pene.

El problema con los mecanismos de estimulación cerebral profunda es que estos procesos son muy invasivos, y el gran desafío de la ciencia sería alcanzar niveles de excitación menos agresivos. Una alternativa sería establecer una conexión entre las señales nerviosas en el pene y los dispositivos de estimulación magnética o corriente continua transcraneal. En el futuro, estos dispositivos podrían volverse internos a través de implantes.

6. Moldeado ajustable y tamaño

Este es uno de los puntos que más despierta la imaginación y los sentimientos de hombres y mujeres sobre el "pene del futuro". La posibilidad de adaptar el tamaño y la forma a la capacidad física o al deseo de la pareja debería ser una de las atribuciones más codiciadas para el miembro masculino. Y esta característica permitiría a los hombres elegir las medidas, así como las características de la superficie de sus extremidades.

En este sentido, cualquier tipo de avance sería una revolución, por lo que además de desafiar el desarrollo de técnicas complejas, también requeriría importantes avances tecnológicos y materiales. En cualquier caso, tal situación no está totalmente descartada, ya que actualmente hay registros de trasplantes de pene completamente infructuosos. Con las posibilidades ya exploradas por la ciencia en el futuro, mezclando tejidos naturales y artificiales, puede ser posible alcanzar un pene sintético, hecho en el laboratorio, con funciones principales e incluso más avanzadas, como cambiar el tamaño y la forma.

7. Vibrador y modo manos libres

Con nuevos "penes" cibernéticos y futuristas que cambiarán de forma y tamaño, ¿por qué no pensar en nuevas tecnologías que van más allá de la forma "convencional" de usarlo? La idea aquí es usar las manos libres para lograr el máximo placer que pueden ofrecer los genitales vibrantes. De esa manera, tanto para hombres como para mujeres, solo pensar en algo emocionante podría llevarlos al orgasmo.

8. conexión a Internet

Sí, los teléfonos inteligentes pueden tener la ingeniosa funcionalidad de conectarse a la red mundial. El objetivo sería mejorar el sexo virtual sin el uso de juguetes eróticos que actualmente mejoran las condiciones para tener relaciones sexuales en línea con una pareja a distancia.

Una aplicación en línea también podría recibir información a través de Bluetooth para monitorear estadísticas y datos biométricos, e incluso establecer objetivos por período. Y las maravillas tecnológicas del "pene digital" también permitirían actualizar el software, trayendo más y más avances a su "plataforma del pene".