¿Por qué las personas mienten incluso cuando no tienen que hacerlo?

1 - Mentir es importante para esta persona de alguna manera

La mentira patológica es una condición en sí misma, pero también puede ser un síntoma de otros problemas psicológicos, como el trastorno de la personalidad o algún episodio maníaco de bipolaridad. El hecho es que estas personas mienten porque creen que tiene alguna función y que la historia que inventaron es significativa de alguna manera. Al darse cuenta de que alguien está planteando un punto, vale la pena preguntar algo como "Parece que esto es realmente importante para usted, ¿por qué?".

2 - Tener ganas de decir la verdad es como perder el control de la situación

Quienes buscan ser o mantener el control de cualquier situación cuentan muchas mentiras. Para estas personas, decir algo que no es cierto es una forma de influir en las personas para que piensen o hagan lo que quieran; temen que el escenario real sea "inconveniente" porque no es compatible con las cosas que dicen.

3 - A veces no quieren decepcionar a alguien

Las personas lidian de manera diferente con lo que sienten, y aunque puede ver la verdad como la mejor salida, puede no tener sentido para el mentiroso compulsivo. Él, en el fondo, termina diciendo una mentira tras otra para no perder el respeto por aquellos en su vida. Quiere ser querido, causar una buena impresión y ser valorado, pero teme que si otros supieran la verdad se avergonzarían de él o lo rechazarían.

4 - También está el caso de la mentira que se convierte en una bola de nieve

Una cosa lleva a la otra, y de repente lo que comenzó como información mentirosa se convirtió en una historia completa, con otras personas y circunstancias. Esto se debe a que para cubrir una pequeña mentira tienes que decir otra mentira, entonces la cosa se sale de control. Para el mentiroso crónico, admitir una mentira es lo mismo que asumir que es un mentiroso, lo que significa bajar la guardia por completo y "perder".

5 - Para el mentiroso, eso ni siquiera es mentira

La forma en que creamos nuestros recuerdos no es muy confiable y siempre depende del momento en que nos encontramos y de la presión que sentimos. Cuando un evento es realmente intenso, en un sentido bueno o malo, tendemos a crear recuerdos más enfáticos y exagerados, y cada vez que hablamos de eso, nuestros cerebros ponen nuevos pedazos en las historias, como si fueran una escultura LEGO, y terminamos creando una nueva versión del evento.

Esto le sucede a todos, incluido el mentiroso compulsivo, que a veces, por decir tantas mentiras, realmente lo cree. En algunos casos más graves, las personas que mienten compulsivamente incluso crean realidades paralelas extremadamente complejas.

6 - Les gustaría que las mentiras que cuentan sean ciertas

Esta es una posibilidad muy concreta: a veces al mentiroso realmente le gustaría que su mentira fuera una verdad, por lo que anula su instinto natural de decir la verdad. Inconscientemente, es posible que los mentirosos crean que repetir una mentira eventualmente se convierte en realidad de alguna manera.

En general, las personas dicen la verdad, tanto es así que muchos acuerdos ya se han hecho y se harán con base en la palabra pronunciada por alguien. Todo nuestro lenguaje se basó en la creencia en la honestidad, por lo que siempre usamos las mismas palabras, y sus sinónimos, por supuesto, para hablar sobre sus significados: cada vez que decimos 'automóvil', por ejemplo, nos referimos al objeto de cuatro. ruedas que sirven como medio de transporte, y posiblemente esto seguirá siendo así.

Todos mienten en mayor o menor medida, pero incluso aquellos que mienten compulsivamente tienden a ser honestos la mayor parte del tiempo. Si bien no es bueno saber que alguien nos está diciendo una mentira, es interesante tratar de entender la motivación detrás de la mentira que está diciendo: preguntas como "¿por qué es tan importante para ti?" O "¿por qué lo necesitas? ¿veo la situación como tú? ”son interesantes; y no debes preguntar "¿por qué estás mintiendo?", ya que esto solo pondría a la persona a la defensiva.

Demostrar comprensión con los sentimientos de una persona puede hacerlos más sinceros, así como reconocer lo interesante que es cuando esa persona habla honestamente. Vivimos en sociedad: nada más natural que ayudarse mutuamente a comprenderse y expresarse mejor, ¿no le parece?

* Publicado el 10/02/2017

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