La teoría loca ofrece una nueva explicación para el origen de la luna

Aunque han estado investigando el origen de la luna terrestre durante décadas, los científicos aún no han alcanzado un consenso sobre cómo el objeto celestial se habría aferrado a la gravedad de nuestro planeta. Ahora se ha agregado una nueva teoría a la lista de investigación y es mucho más excéntrica que las otras.

Según sus creadores, la luna se habría formado en una nube gigante de roca vaporizada en forma de rosquilla que finalmente se condensaría en la Tierra.

La luna habría sido capturada por la gravedad de la Tierra hace miles de millones de años. Alternativamente, la Tierra y la Luna se habrían formado como un sistema binario dentro del disco protoplanetario del Sol. Es decir, una Tierra que gira rápidamente, en un ejemplo de fisión a escala cosmológica, habría expulsado una gran masa, originando la Luna. .

Luna 1

Teoría predominante

Sin embargo, la teoría predominante sobre el origen de la luna sugiere que un objeto del tamaño de Marte, llamado Theia, habría lanzado otra versión de la Tierra hace unos 4.500 millones de años.

La colisión habría arrojado toneladas de piedra fundida y metal a la órbita de la Tierra. Con el tiempo, todo esto se condensó y formó nuestra Luna. Un estudio de 2014 sugirió que se detectaron rastros de la hipótesis de Theia en muestras lunares, lo que refuerza aún más la hipótesis.

Luna 2

Nuevo objeto astronómico

El problema es que si bien ciertas características químicas entre la luna y la tierra son muy similares, existen diferencias importantes. Según una nueva teoría de la formación lunar, estaría involucrado un tipo completamente nuevo de objeto astronómico llamado sinesia.

La sinesia ocurre cuando nuevos objetos en forma de planeta chocan, creando una masa rápida de roca fundida vaporizada. Porciones significativas de esta nube orbitan a su alrededor, transformándose en un objeto gigante con forma de rosquilla que flota en el espacio.

Luna 3

Formación del planeta

Una sinesia dura solo entre 100 y 200 años, disminuyendo rápidamente a medida que pierde calor. El vapor de roca primero se condensa en un líquido y luego se transforma en un planeta fundido.

Los científicos creen que la Tierra y quizás muchos otros planetas rocosos surgieron de esta manera. Pero es importante tener en cuenta que los astrónomos nunca han podido observar este fenómeno, por lo que es solo una hipótesis.