La Tierra pudo haber sido golpeada por la sobreexplosión galáctica en la Edad Media

(Fuente de la imagen: Reproducción / NASA)

Según la BBC, los científicos alemanes han encontrado evidencia de que la Tierra pudo haber sido golpeada por un estallido de rayos gamma, el tipo de explosión más poderoso que puede ocurrir en el universo, en la Edad Media, más precisamente durante el siglo VIII. El estudio sugiere que este evento puede haber ocurrido debido a la fusión de dos agujeros negros o estrellas de neutrones en nuestra galaxia, causando una emisión violenta de energía.

Según la publicación, los investigadores encontraron algunos árboles milenarios ubicados en Japón con niveles inusuales de un tipo de carbono radioactivo, carbono 14, así como la presencia de berilio 10, también radioactivo, en los núcleos de hielo recolectados en la Antártida.

Ambos isótopos se forman cuando una cantidad intensa de radiación llega a los átomos en las capas superiores de la atmósfera y, después de analizar los anillos de crecimiento del tronco y el hielo antártico, los científicos concluyeron que una gran cantidad de energía del espacio ha alcanzado Tierra entre los años 774 y 775.

Evento misterioso

(Fuente de la imagen: Reproducción / NASA)

Pero lo que pudo haber causado este evento sigue siendo un misterio, y los científicos especulan sobre la posibilidad de que ocurra una gigantesca explosión en la Vía Láctea. Como explicaron, la colisión de agujeros negros, enanas blancas o estrellas de neutrones puede causar emisiones de radiación increíbles, y según las estimaciones, la fusión, si eso fue lo que causó la explosión, podría haber ocurrido de 3 a 12. mil años luz de la Tierra.

Aún así, según los investigadores, es muy probable que la población de la época ni siquiera se diera cuenta de lo que estaba sucediendo, algo que no habría sucedido si la explosión hubiera golpeado la tierra hoy. Si nuestro planeta recibiera una emisión de rayos gamma como lo que parece haber ocurrido en la Edad Media, todos los satélites en órbita serían derribados, por ejemplo.

Las emisiones gigantescas de rayos gamma son eventos raros, que ocurren una vez cada 10, 000 años por galaxia. Algunas estimaciones indican que estas explosiones pueden ocurrir una vez cada 1 millón de años, por lo que podemos esperar que numerosos estudios contradigan los datos presentados por los investigadores alemanes.