El tráfico aéreo puede ser responsable del aumento de las nubes en los polos.

Según los datos del Laboratorio de Aviación y Medio Ambiente del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), el tráfico aéreo representa el 12% de las emisiones de gases de carbono relacionadas con el transporte. Además del daño a la capa de ozono, estas emisiones también están causando otras consecuencias, como se revela en el sitio web Discovery News.

Según la información citada por David Siskind de la División de Ciencias Espaciales del Laboratorio de Investigación Naval, el tráfico aéreo puede ser responsable del aumento de las nubes en los polos, más precisamente en la mesosfera, la parte de la atmósfera que es aproximadamente 50 a 85 kilómetros de altitud.

Estudiar en las alturas

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El descubrimiento de este fenómeno fue inesperado por los investigadores, ya que buscaban un efecto diferente: la reducción de las nubes en esta capa, la actividad solar y el salto en el calentamiento global. En cambio, se sorprendieron por el aumento en el número y el brillo de las nubes en la región de la mesosfera en los últimos dos años.

"Las nubes mesosféricas polares ahora parecen estar más extendidas en una escala mayor de lo que esperábamos", dijo David Siskind. El científico y su equipo de estudio utilizaron datos del satélite Mesosphere Ice Aeronomy de la NASA para verificar el brillo y la cantidad de nubes en esta capa de la atmósfera en las regiones polares.

Sin embargo, la mayor duda de los investigadores es de dónde proviene el agua necesaria para la formación de nubes. Según Siskind, no hay muchas señales de que el agua llegue a la mesosfera. Por otro lado, los cohetes y los lanzadores han descubierto que es posible que llueva en la mesosfera.

Aumento de dióxido de carbono

"Todavía estamos trabajando en cómo funciona todo", dijo Siskind. El investigador aún tiene que esperar nuevos desarrollos en la gama de métodos de investigación para ver si están siendo causados ​​por el cambio climático, lo que puede indicar que las nubes son efectos relacionados con el aumento de los niveles de dióxido de carbono.