Vea dónde sentarse en el avión para reducir las posibilidades de enfermarse

La situación es tensa para muchas personas. Subes al avión o al autobús y ves desde lejos a esa persona con los ojos hinchados y un pañuelo en la mano. No toma mucho tiempo y comienzan los estornudos. Su deseo principal resuena en su cabeza: "No puedo enfermarme". En algunos casos, esto es inevitable, pero los científicos estadounidenses han realizado un estudio tratando de descubrir dónde las posibilidades de enfermarse son menores en un avión.

Para la investigación, respaldada por el fabricante de aviones Boeing, los científicos de la Universidad Emory y Georgia Tech recopilaron datos sobre cinco vuelos de larga distancia, todos los cuales estaban prácticamente llenos. El estudio se realizó durante la temporada de la mayor proliferación del virus de la gripe al registrar cómo los pasajeros se movieron dentro del avión y tomar cientos de muestras del medio ambiente para analizarlas posteriormente en busca de 18 enfermedades respiratorias comunes.

Lo nuevo es que aunque toser, estornudar o respirar la propia enfermedad son las formas más comunes de transmitir una enfermedad respiratoria, solo pasar horas cerca de alguien que está enfermo es suficiente para infectarse.

Bien, ¿cuál es el mejor lugar para sentarse?

Las posibilidades de contraer gripe en un avión son las siguientes. Si una persona enferma está sentada en el asiento del pasillo en un avión con tres asientos a cada lado, los dos pasajeros en el costado, así como los tres en la fila delantera y trasera, tienen un 80 por ciento de posibilidades de contraer la enfermedad.

Al otro lado del pasillo, el pasajero justo al lado del transmisor, así como los que están delante y detrás de él, tienen la misma probabilidad de enfermarse. Los que están junto a ellos tienen la suerte de ver que la probabilidad de contraer la enfermedad cae entre 10% y 30%. El estudio encontró que hay filtros en la circulación de aire del avión, a diferencia de un autobús, que tiene ventanas para este propósito.

Los movimientos del transmisor potencial dentro de la aeronave, como ir al baño o recoger una bolsa del portaequipajes, no tienen mucha influencia en la probabilidad, por lo que la clave es tratar de mantenerse lo más lejos posible.

Según los cálculos de los científicos, la mejor manera de prevenir el contagio es sentarse en un asiento junto a la ventana, ya que sería el lugar más seguro en el avión a este respecto. En segundo lugar estaba el sillón del medio, el que estaba en el pasillo era el peor cuando se trata de contagio.

Otra investigación sugiere que las gotas de un estornudo pueden viajar una distancia de hasta 1, 80 metros, sin considerar que el virus de la gripe puede sobrevivir hasta 24 horas en la superficie después de que una persona enferma lo haya expulsado.

Por estas razones, los autores de la investigación advierten que es limitada y solo debe usarse como precaución, y no debe olvidarse de lavarse bien las manos siempre. Además, está el "pequeño" detalle de que los lugares suelen estar marcados, por lo que terminas sin tener tantas opciones, ¿verdad?