Probado: el cuerpo humano acaba de 'ganar' un nuevo órgano

El hombre busca maneras de llegar a los extremos del espacio o las entrañas del planeta Tierra, y aún hay mucho más sobre sí mismo que aún necesita ser descubierto. Recientemente, por ejemplo, un nuevo órgano dentro de nuestro propio cuerpo ha sido catalogado por científicos: el mesenterio.

Permanece en el sistema digestivo, y saber cómo funciona puede ayudar a tratar problemas abdominales y enfermedades que aún no se han resuelto. De hecho, incluso se había identificado previamente, pero se pensaba que estaba compuesto de estructuras segmentadas. Ahora se ha demostrado que es solo un órgano.

"En el estudio, que fue revisado y evaluado, estamos diciendo que ahora tenemos un órgano en nuestro cuerpo que no había sido reconocido como tal antes", explica J. Calvin Coffrey, de la Universidad de Limerick, Irlanda, responsable de la investigación publicada en la revista. The Lancet

El mesenterio fue descubierto hace siglos, pero solo ahora ha sido catalogado como un órgano.

Coffrey muestra que si bien el mesenterio era conocido por los eruditos durante más de 100 años, su descripción era bastante diferente de su realidad. Consiste en un doble pliegue de peritoneo y une el intestino a la pared abdominal. Leonardo da Vinci, hace varios siglos, ya había descrito esta estructura, que solo ahora ha obtenido el estatus de órgano.

El científico detrás del estudio descubrió que el mesenterio debería considerarse un órgano específico en 2012, pero tomó otros 4 años y muchas observaciones nuevas para hacerlo oficial. Ahora los estudiantes de medicina están comenzando a aprenderlo en la universidad, y los avances en el campo pueden curar problemas hasta ahora misteriosos: después de todo, ¿el mesenterio tiene alguna influencia en los diferentes dolores abdominales?

Según Coffrey, ahora que todas las estructuras del nuevo órgano han sido identificadas, el siguiente paso es descubrir su función principal. Sabiendo esto, se pueden identificar posibles enfermedades y abrir las puertas a la ciencia mesentérica, una rama completamente nueva dentro de la medicina.