Un hombre de 36 años intercambia suero de leche por la leche materna de su novia

Mega Curioso siempre está atento a las tendencias más extrañas del mundo: en 2014, informamos que los atletas se alimentarían de leche materna para mejorar su rendimiento deportivo. Ahora, cuenta la historia de una mujer de 36 años que dejó su trabajo para cuidar a su novio.

Jennifer Mulford se ha excusado de su trabajo como camarera para nutrir al culturista Brad Leeson, que también tiene 36 años. La pareja vive en Atlanta, Estados Unidos, y practican juntos la nueva táctica de suplementos vitamínicos. "Cuando leí sobre el vínculo que la lactancia materna adulta podría crear entre dos personas, estaba celosa", explica Jennifer.

El único obstáculo en el proceso fue que Jennifer no era madre recientemente y, por lo tanto, no estaba lactando, ¡su hijo nació hace 20 años! Por lo tanto, para estimular la producción de leche, ella come un tipo de alimento que hace que su cuerpo crea que necesita alimentar a un niño. Entonces su cuerpo comenzó a producir el precioso líquido para Brad, quien lo consume cada dos horas.

Jennifer necesitaba estimular la lactancia a través de pastillas

Lactancia materna en adultos: ¿qué es?

El movimiento de la relación de lactancia materna en adultos (ABR) promueve la lactancia materna en adultos como una fuente muy rica de proteínas, tanto que ya tiene muchos partidarios, en su mayoría atletas que intercambian suplementos de laboratorio por leche materna. Por lo general, estas personas pueden comprar el producto a través de Internet, en sitios que lo ofrecen por $ 2.50 cada 30 ml.

Jennifer Mulford explica que cuando se enteró de ABR, pensó que sería una gran idea, ya que sus senos son las zonas erógenas que más la excitan durante el sexo. Por lo tanto, la práctica también sería placentera para ella. Solo ella necesitaba encontrar a alguien para alimentar, porque cuando se enteró de ABR estaba soltera.

La iniciativa vino de Jennifer, a quien le gusta que le estimulen los senos.

"Publiqué información sobre ABR en sitios de citas y en varios foros, pero no pude encontrar a nadie interesado en amamantarme", explica Jennifer. Fue hablando con un viejo novio, Brad, que el ex camarero vio la oportunidad de realizar su sueño. "Cuando dijo que estaba interesado en los senos grandes, me di cuenta de que era hora de preguntarle qué pensaba sobre la lactancia en adultos", recuerda la mujer.

Al niño le encantó la idea y fue a investigar el tema. "En ese momento, sabía que tenía un compañero de vida", suspira la mujer. La idea de crear un vínculo más allá de la relación ha llevado a ambos a poner en práctica el experimento, que, hasta ahora, les está dando una gran incertidumbre.

Algunos atletas intercambiaron suplementos por leche materna directamente de la fuente.

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