3 cuentos de hadas más extraños que aún no conoces
Hace unos días les contamos cinco cuentos de hadas que no tenían finales felices, lo que nos recuerda que, de hecho, estas historias no siempre están dedicadas a los niños. El hecho es que todavía hay otras narraciones locas que queremos contarte, así que sin más preámbulos, mira algunas de ellas a continuación y luego dinos cuál es tu favorita:
1 - El pájaro Fitcher
Esta es una historia de los hermanos Grimm. Todo comenzó cuando un mendigo especializado en secuestro de niñas llegó a la casa de tres hermanas. Convenció al mayor para que lo dejara entrar y, tan pronto como tuvo la primera oportunidad, obligó a la pobre niña a irse con él. La niña fue con él a la casa dorada que tenía el hombre, donde le prometió dar lo que quisiera siempre que aceptara casarse con él.
Poco después de la "propuesta de matrimonio", el hombre dijo que debería abandonar la casa, pero que volvería pronto. Le dejó a la niña un huevo, que ella debería cuidar a toda costa. Además, una advertencia: se le prohibió entrar en una habitación específica, la habitación del dolor y la muerte.
Tan pronto como el hombre se fue, la niña sintió curiosidad por la información que acababa de recibir y no dio otra: entró en la habitación prohibida. En la sala de los horrores encontró un cuenco lleno de sangre y los restos de varias chicas. Además, había un hacha grande.
Asustada por la escena que acababa de ver, la niña dejó caer el huevo al suelo. En lugar de una mezcla de clara de huevo, yema de huevo y cáscara, el huevo roto se convirtió en sangre, una sangre que la niña trató de limpiar a toda costa, pero fue en vano.
Cuando el mendigo regresó a la casa dorada y vio el huevo roto y ensangrentado, arrastró a la niña a la habitación prohibida y la mutiló. Luego regresó a la casa de sus hermanas y robó a otra joven, que terminó teniendo el mismo destino que ella. Finalmente, volvió a buscar a su tercera hermana.
Esta joven sospechaba más y cuando recibió el huevo lo escondió antes de entrar en la habitación prohibida. Tan pronto como descubrió los cuerpos desmembrados de sus hermanas, unió las extremidades con los cuerpos y los resucitó. Cuando el mendigo regresó y vio que no había sangre en el huevo, dijo que la niña había pasado la prueba y que sería su verdadera novia.
Como regalo de bodas, la niña le pidió una canasta de oro para que pudiera llevársela a su padre. Secretamente, escondió a sus dos hermanas en la canasta. Para disimular su ausencia, la joven colocó una calavera en la ventana para dar la impresión de que estaba allí, observando al novio. Además, la niña se cubrió de miel y plumas para poder disfrazarse de pájaro. Algún tiempo después, cuando el mendigo y sus amigos llegaron para la boda, los hermanos de las niñas encerraron a todos en la casa y los quemaron vivos. Fin
2 - Las tres hojas de serpiente
Una obra más de los hermanos Grimm, entonces: prepárate. Un rey poderoso tenía una hija que era muy hermosa, pero también muy extraña. La princesa tenía muchos admiradores, pero siempre se negaba a casarse con los temerosos que no estaban de acuerdo con su pacto de amor muy simple y razonable: si ella moría antes que su esposo, él debería ser enterrado vivo junto a ella.
La lógica utilizada por la niña era que si su esposo la amaba más que cualquier otra cosa, la vida no tendría sentido para él después de que ella muriera, por lo que no debería desear nada más que morir con ella.
Mientras tanto, lejos, pero no tanto, un joven salió de su casa para ganar dinero como soldado. Participó en varias batallas, muchas de las cuales fueron responsables de la muerte de sus amigos, pero el joven continuó, firme y fuerte, su vida como soldado. La valentía del joven llamó la atención del rey, quien le dio un valioso tesoro y lo nombró caballero de la corte.
Mientras visitaba el castillo del rey, el joven se enamoró de una bella pero extraña princesa joven. Incluso aceptó las condiciones que ella requería para aceptar el matrimonio. Es decir: fue amor.
Los dos vivieron felices durante muchos años hasta que la princesa se enfermó y murió. El príncipe soldado comenzó a pensar en una forma de escapar de su promesa, pero los guardias del castillo lo arrojaron al cuerpo de la princesa para que él también muriera.
Mientras estaba allí, encerrado en la tumba de su amado, el príncipe vio acercarse una serpiente. Astuto, pronto mató al animal para evitar que devorara el cuerpo de su esposa. Luego se acercó otra serpiente, acompañada de tres hojas, que colocó sobre las heridas de la serpiente muerta, devolviéndola a la vida. Las dos serpientes desaparecieron, pero las hojas cayeron al suelo, y el príncipe las usó para devolverle la vida a la princesa. Los dos escaparon de la tumba y regresaron al castillo.
Las hojas cambiaron totalmente a la princesa, que se enamoró del capitán del barco que la llevó al castillo. Los dos planearon arrojar al príncipe al mar y luego casarse. Un oficial del barco vio la escena y saltó al agua para salvar al príncipe. Los dos llegaron mágicamente al castillo antes que la princesa y le contaron al rey todo lo que había sucedido.
Cuando la princesa y el capitán regresaron, el rey los sentenció a muerte y los envió de vuelta al mar en un barco lleno de agujeros. El final
3 - La niña sin manos
Un molinero estaba cortando árboles cuando se encontró con un anciano que, al ver la cara miserable del molinero, le ofreció todas las riquezas del mundo a cambio de todo lo que había detrás de él. Pensando que solo quedaba un manzano, el molinero aceptó rápidamente la oferta del anciano, que prometió regresar después de tres años.
El molinero felizmente regresó a casa, pero encontró a su hija junto al manzano. Cuando el viejo regresó, la hija del molinero trató de protegerse dentro de un círculo de tiza que se arrojó al suelo. De esa manera ella sería demasiado pura para que ese demonio la tocara.
Frustrado, el demonio le prohibió a su padre darle agua a su hija, para que no pudiera lavarse. Las lágrimas de la niña sirvieron para hacer desaparecer toda la impureza de su cuerpo. Entonces ella siempre fue pura. El demonio ordenó al molinero amputar las manos de la niña con su hacha. Las lágrimas de la niña una vez más la ayudaron y, después de perder las manos, impidieron que su sangre se drenara.
El demonio se dio cuenta de que había perdido la pelea y se fue. Por supuesto, la niña decidió irse de casa después de los últimos eventos. Caminaba mucho por la noche y de repente, por razones obvias, tenía mucha hambre. Fue entonces cuando la niña encontró el jardín de un palacio, lleno de manzanos y jugosas peras. El jardín, sin embargo, estaba rodeado por un foso gigante.
Ella comenzó a rezar, y de repente apareció un ángel y drenó el pozo para que la niña pudiera cruzarlo y alimentarse. Al día siguiente, uno de los guardias del palacio afirmó haber visto un fantasma sin manos entre los árboles. Intrigado, el rey se escondió en el jardín y observó a la niña cruzar el foso y recoger una pera la noche siguiente. Al encontrar a la niña, el rey decidió casarse con ella y le presentó un par de manos plateadas.
Desafortunadamente, el demonio todavía estaba furioso, alegando que la niña le pertenecía. Cuando el rey tenía que viajar a la guerra, el demonio interceptaba las cartas que enviaba a casa. Envió una carta a la madre del rey, ordenándole que matara a su esposa e hijos. Incapaz de matar a sus propios nietos, la mujer les ordenó cazar dos venados, enviar los ojos y lenguas de los animales como prueba de que había matado a los niños.
Cuando el rey se dio cuenta de lo sucedido, se desesperó y prometió no beber ni comer hasta encontrar a su esposa e hijos. Le llevó siete años descubrir a su esposa en una granja cerca de su palacio; mientras tanto, sus manos habían resurgido. Fin
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