Estudio de drogas muestra efecto prometedor contra el Alzheimer

La compañía farmacéutica Eli Lilly ha publicado los primeros resultados de ensayos clínicos con un nuevo medicamento llamado solanezumab, que podría reducir la tasa de progresión de la enfermedad de Alzheimer en un tercio. Los datos fueron divulgados el miércoles 22 por la compañía en la Conferencia Internacional de la Asociación de Alzheimer en Washington, Estados Unidos. En 2016, se espera que la compañía realice nuevos ensayos clínicos que puedan indicar evidencia definitiva sobre el funcionamiento del nuevo medicamento. Según los científicos de la compañía, todavía no hay medicamentos que puedan detener el Alzheimer que mata las neuronas, pero solanezumab podría mantener estas células vivas.

Según los científicos de Eli Lilly, los medicamentos actuales utilizados contra el Alzheimer solo actúan sobre los síntomas de la demencia, ayudando al funcionamiento de las células moribundas. Pero solanezumab ataca las proteínas deformadas conocidas como amiloides, que se acumulan en el cerebro cuando ocurre la enfermedad. Los científicos creen que la formación de placas amiloides adhesivas entre las neuronas puede causar daño y eventualmente matar las células nerviosas.

Según el director de Lilly Research Laboratories, Eric Siemers, las pruebas dieron pistas de que el medicamento funciona para pacientes en etapas tempranas de Alzheimer, reduciendo la progresión de la enfermedad en un 34%. "Es una prueba más de que solanezumab tiene un efecto sobre la patología subyacente de la enfermedad. Creemos que existe la posibilidad de que solanezumab sea el primer medicamento disponible que modifique la enfermedad", agregó.

Con el tiempo, varias compañías han desarrollado ensayos farmacológicos que inicialmente parecían prometedores pero no intentaron reducir significativamente el deterioro de la memoria y otras tareas cognitivas deterioradas en pacientes con la enfermedad. Si se aprueba en futuros ensayos clínicos, el medicamento Eli Lilly podría ser el primero en retrasar la progresión del Alzheimer. Pero la droga ya ha fallado en todos los estudios anteriores.

Dos grandes ensayos clínicos realizados en 2012 fracasaron y no fue posible demostrar diferencias entre la acción del fármaco y la acción del placebo. Sin embargo, los científicos de la compañía tenían esperanzas porque, según los informes, solanezumab detuvo el deterioro cognitivo en pacientes con una forma atenuada de la enfermedad. La compañía decidió reiniciar nuevos ensayos clínicos en 2013, cuya finalización está programada para fines de 2016.

Por Fábio de Castro - Sao Paulo

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