¿Sabías que las dunas hacen sonidos?

Imagina que estás en una expedición en la región del desierto del Sahara septentrional de Marruecos, sentado en un camello y friendo al sol. De repente comienza a enrollarse y sale un zumbido continuo y misterioso. Hoy en día, sería muy fácil levantar su teléfono inteligente e investigarlo, pero cuando Marco Polo viajó por la región en el siglo XIII, describió el sonido como el de los viajeros embrujados. Escucha y saca tus propias conclusiones:

El sonido puede parecer aterrador al principio, especialmente si lo escucha en medio de la nada, pero un científico francés parece haber encontrado la explicación del fenómeno.

Condiciones ideales

La producción del siniestro zumbido no es exclusiva del Sahara, ya que hay registros de sonidos similares en otras regiones del mundo. Para que las dunas canten, se necesita un día ventoso, lo que hace que la arena se acumule más y más en la parte superior de las dunas, causando incluso pequeñas avalanchas de arena.

Desierto del Sahara

Desierto del Sahara

Además, el día debe ser cálido y seco, lo cual no es nada inusual en un desierto, pero ¿por qué solo unas pocas dunas en el mundo producen el zumbido? E incluso entre ellos, ¿cuál es la razón de la diferencia en el sonido generado?

Millones de colisiones

El secreto, según el equipo de biofísicos que investigó el fenómeno, reside en la arena misma. Viajaron a Marruecos y Omán, dos países que tienen dunas que emiten sonidos con frecuencia, y los grabaron con equipos profesionales. Durante esta etapa, se dieron cuenta de que simplemente caminar sobre la arena producía un sonido distintivo y que variaba con la velocidad de la pisada. Después de todas las mediciones, también recolectaron muestras de arena y regresaron al laboratorio.

Desierto cerca de Muscat

Desierto cerca de Muscat, capital de Omán

El análisis ha demostrado que la arena de las dunas ubicadas en Marruecos tiene granos de 160 micras de tamaño uniforme, equivalentes a 3 veces el grosor de un cabello humano. Las dunas de Omán ya no son tan uniformes; Los frijoles varían entre 150 y 300 micras. Casualmente, el sonido del desierto marroquí es más uniforme, mientras que en Omán el sonido parece variar más.

El equipo aún no está seguro de la causa del sonido, pero el tamaño de los granos de arena tiene una relación directa con el problema. Fue posible reproducir el sonido en el laboratorio, lo que demuestra que el zumbido no depende del tamaño de las dunas. El autor principal del estudio, Stéphane Douady, sospecha algo mucho más simple.

El sonido sería generado por el movimiento de los granos de arena por el viento, el fenómeno causado por el impacto de millones de pequeños granos de arena. Por lo tanto, en un lugar amplio como las dunas de un desierto, una multitud de pequeñas colisiones generarían un sonido característico del lugar. Un buen grito de batalla, ¿no te parece?