Los científicos rompen la barrera del cero absoluto

La nebulosa de Boomerang tiene una expansión de gas tan rápida que casi alcanza el cero absoluto (Fuente de la imagen: Reproducción / NASA)

El cero absoluto es una temperatura hasta ahora hipotética que haría que toda la energía térmica de un material o entorno desapareciera por completo. En marzo de 2012, incluso publicamos una historia que explica por qué los humanos nunca podrían alcanzar ese límite. Ahora la ciencia juega una de esas piezas que amamos y sale con una novedad sorprendente: esta temperatura no solo es alcanzable, sino también superable.

Para lograr esto, los científicos de la Universidad Ludwig Maximilian en Alemania crearon un gas cuántico con átomos de potasio específicamente alineados con la ayuda de láseres y campos magnéticos.

Por lo tanto, cuando los campos magnéticos se ajustaron rápidamente, los átomos cambiaron de un estado de baja energía a un estado con el nivel de energía más alto posible. Esta transición, junto con el hecho de que los átomos continuaron en orden gracias al rayo láser, hizo que la temperatura del gas excediera unas pocas billonésimas por debajo de la temperatura cero absoluta (-273, 15 ° C).

Comportamiento extraño

Con este avance científico, los investigadores podrían, por ejemplo, crear nuevos tipos de materia, pero más bien tendrían que resolver una especie de efecto secundario de esta temperatura: el físico teórico Achim Rosch de la Universidad de Colonia en Alemania estima que en En dicho sistema, los átomos por debajo del cero absoluto flotarán en lugar de ser arrastrados por la gravedad.

Robert Boyle, pionero de la teoría del cero absoluto (Fuente de la imagen: Reproducción / Wikipedia)

Otra peculiaridad de este gas es que se comporta de manera similar a la de la energía oscura, una fuerza que todavía se considera uno de los misterios no resueltos de la física y que juega un papel fundamental en la expansión del universo, ya que desafía la gravedad que intenta trae el universo de vuelta a su centro.

Cuando los átomos de potasio del gas cuántico cambian su estado de energía, dejan de repelerse y se sienten atraídos entre sí. Sin embargo, no colapsan entre sí, ya que la temperatura por debajo del cero absoluto hace que la cadena se estabilice. Este descubrimiento puede ayudar a los cosmólogos a comprender mejor cómo funciona nuestro universo.