Escuchar voces que no existen no es tan inusual como crees

¿Alguna vez has escuchado voces cuando no hay nadie cerca? ¿O incluso alguien que te llama desde la distancia, solo para mirar hacia atrás y darte cuenta de que nadie realmente te gritó? Aunque esto da un poco de miedo, no es tan inusual, sino todo lo contrario. Y antes de preocuparse, no tiene nada que ver con espíritus susurrando en sus oídos o signos de locura.

Los psicólogos solían decir que esto es indicativo de un trastorno mental, pero aparentemente este pensamiento es incorrecto. Según un nuevo estudio publicado en The Lancet Psychology, fue posible comprender mejor este fenómeno. En él, 153 personas respondieron un extenso cuestionario sobre el tema, y ​​los investigadores descubrieron que existen variaciones en la forma en que las personas escuchan estas voces.

Por ejemplo, cuando hablamos de escuchar estos sonidos, muchos imaginan personas esquizofrénicas que escuchan voces enojadas que les dicen que hagan cosas malas (algo que se ha explorado en muchas películas). Pero según el estudio, estas voces no se caracterizan por personalidades distintas que intentan hablar con sus oyentes (en su mayor parte).

Estas voces pueden entenderse como variaciones en los diálogos internos que todos tenemos a diario, cuando pensamos si debemos hacer algo X o Y, comprar esto o aquello, no son exactamente conversaciones. De hecho, la investigadora Angela Woods descubrió que el 15% de las personas que afirmaban escuchar voces no fueron diagnosticadas con ningún tipo de trastorno psicológico.

Las terapias ayudan mucho

Las personas con estas condiciones dicen que a veces las voces son amigables, a veces no tanto. A menudo, las sesiones de terapia pueden ayudar a las personas a comprender estas líneas internas y aprender a lidiar con ellas, tal vez incluso desterrándolas al subconsciente. El punto es que hay una amplia gama de motivos y tipos de voces que las personas escuchan (muchas de las cuales no siguen definiciones comunes).

Woods y los otros investigadores creen que necesitamos hablar con más personas que escuchan voces para comprender exactamente lo que están experimentando y cómo se pueden tratar cuando sea necesario.