Científico predice cuándo existirá la píldora de ejercicio

Por mucho que todos sepan que la actividad física es una excelente manera de cuidar la salud y perder peso, algunas personas simplemente no pueden soportar la idea de ingresar a un gimnasio o invertir parte de su día en caminar y cosas similares. A veces esto sucede a través de un trauma; otros, por pura falta de identificación en absoluto. Y, por supuesto, hay quienes no pueden practicar actividades físicas debido a alguna condición de salud.

Es para estos y otros que mucha investigación ya se ha hecho en un intento de encontrar una manera de hacer que el cuerpo humano tenga los beneficios de las actividades físicas sin la práctica de estos ejercicios. Suena mágico, pero la humanidad ha caminado algunas casas en esa dirección. Por fin.

Scient Alert publicó los resultados de un estudio realizado por un equipo internacional de investigadores, que se unieron para descifrar las reacciones moleculares que ocurren en el cuerpo humano durante una sesión de actividad física y, después de eso, tratar de desarrollar una forma de estimular estas reacciones sin El ejercicio físico.

Solo para darle una idea de la escala de este trabajo, los científicos han tratado de identificar mil cambios moleculares que la actividad física causa en los músculos esqueléticos. Además, la idea también era descubrir cuáles de estos cambios fueron los más significativos: esta información sería un avance importante hacia la formulación de una "píldora mágica" que podría tener el mismo efecto en el cuerpo humano que una buena clase de gimnasia.

Según el coordinador de investigación Nolan Hoffman, de la Universidad de Sydney, fue obligada a estudiar nuevos tratamientos, pero en el futuro puede ser la clave para formular un medicamento que podría "engañar" al cuerpo humano para que lo crea. eso solo corrió un maratón.

Hoffman explica que no es a partir de hoy que la ciencia conoce las reacciones moleculares causadas por la práctica de actividades físicas. La diferencia, según él, es que este nuevo estudio permitió mapear estas reacciones y así comprender mejor la complejidad de estas señales.

En el experimento, cuatro hombres voluntarios sirvieron como conejillo de indias y ofrecieron muestras de músculos antes y después de 10 minutos de ejercicio intenso en una bicicleta estática. Luego, las muestras se analizaron para poder realizar el mapeo de las reacciones moleculares.

Como estamos hablando de miles de reacciones, ya podemos imaginar que desarrollar un medicamento que pueda activarlas todas a la vez no debería ser la tarea más fácil del mundo. Por lo tanto, la idea es desarrollar un medicamento que reproduzca la más importante de estas reacciones.

Desafortunadamente, esto puede demorar más de lo que quisiéramos y, según el propio científico, debemos esperar al menos una década antes de pensar en comprar un medicamento que pueda ser tan bueno como una hora de gimnasio.

La idea para los científicos no es solo promover una alternativa para los académicos, sino ayudar a las personas mayores, obesas, diabéticas y cardíacas. Si nos detenemos a pensar, este medicamento sería de gran utilidad para cualquiera que, debido a alguna condición de salud, no pueda practicar actividades físicas normalmente. Solo podemos esperar que funcione.

* Publicado el 16/10/2015