El tenedor de 10 cm se retira de la uretra septuagenaria

Un hombre de 70 años ingresó en el Departamento de Emergencias del Hospital de Canberra, Australia, con dolor uretral severo y sangrado. El caso no habría salido a la luz si no se hubieran omitido tan pocos detalles: la causa del sufrimiento de este caballero fue un tenedor de cuatro pulgadas, que se había insertado en su propio pene para placer sexual.

Los cubiertos no se podían ver externamente, pero el personal médico los quitó con la ayuda de unas pinzas y mucho lubricante. El caso incluso se documentó en la revista científica "International Journal of Surgery".

Y no pienses que esta fue una situación inusual. Según el artículo, los hospitales ya han retirado los objetos más variados de la uretra de otros hombres, como bolígrafo, cable telefónico, paja, lámpara, zanahoria e incluso una serpiente.

Parece obvio, pero vale la pena señalar que dicha actividad puede ser muy perjudicial. Según un estudio publicado en 2010, "las consecuencias urológicas de tal comportamiento pueden ser significativas y tener implicaciones para el paciente que incluso pueden conducir a la muerte por infección".