¿Por qué Cataluña quiere independencia de España?
Este viernes (27), el Parlamento de Cataluña declaró su independencia de España, algo que llevó la euforia a los miles de catalanes que acompañaron la noticia. En la práctica, sin embargo, la región permanece bajo el dominio español, tanto es así que el Senado autorizó una intervención para expulsar al gobierno de Cataluña.
Esta lucha no es de hoy: hasta 1714, Cataluña no era parte de España, tenía una cultura, leyes e idioma específicos. Con la Guerra de Sucesión española, que tuvo lugar entre 1701 y 1714 por el trono de la monarquía del país, la región fue finalmente derrotada y anexionada a España como la conocemos hoy.
Desde entonces, quien asumió el trono siempre trató de imponer las costumbres españolas hasta que, en 1931, se restableció la Generalitat, el gobierno nacional catalán. Pero el general Franco, sin embargo, no se tragó muy bien esta historia, recuperando el control de Cataluña en 1938 después de una batalla con más de 3.500 muertes catalanas.
Conflictos económicos
En 1977, con el regreso de la democracia a España, Cataluña se volvió cada vez más independiente, buscando siempre la autonomía completa, algo que finalmente puede suceder en los próximos meses. La crisis económica ha acelerado el proceso, tanto es así que el 90% de los catalanes votaron por la independencia en un referéndum el 1 de octubre de este año, a pesar de las acusaciones de fraude y manipulación de votos en esta encuesta.
Mariano Rajoy, presidente de España para el Partido Popular (PP), está en contra de la separación. Sin embargo, el PP en Cataluña es extremadamente débil, abriendo brechas para conservadores de CDC e izquierdistas de ERC. Incluso los radicales CUP son más numerosos y populares que los PP en la región. Juntos lograron unir a los catalanes en favor del separatismo.
Cataluña es el corazón industrial de España. Si logra la independencia, nacería como la 34ª economía más grande del mundo, por delante de Portugal y Hong Kong, por ejemplo. El PIB per cápita, por otro lado, sería más alto que el de las grandes potencias como Italia y Corea del Sur.
Resulta que España perdería alrededor del 20% de su poder económico, y eso no está en los planes del país que ya enfrenta una crisis económica prolongada. Debido a esto, se están produciendo conflictos en Cataluña entre funcionarios del gobierno español y separatistas, sin que el mundo sepa cuál será el final de esta disputa.
