El trasplante de células madre mejora el aprendizaje y la memoria

Las células madre se transformaron en memoria y células nerviosas relacionadas con el aprendizaje por primera vez en la ciencia. Al menos eso es lo que dice el profesor de neurociencia Su-Chun Zhang, quien también es autor de un estudio que evalúa los trasplantes de células madre humanas en ratones.

Según los resultados de la investigación, las células madre ayudan a curar enfermedades neurológicas. Una vez dentro del cerebro de las ratas, formaron dos tipos comunes y vitales de neuronas específicas del comportamiento humano, relacionadas con las emociones, la memoria, el aprendizaje, las adicciones y muchos otros problemas psiquiátricos.

Pruebas

El experimento fue posible porque los ratones recibieron tratamiento y, por lo tanto, no rechazaron las células humanas trasplantadas. Después del procedimiento, los animales fueron significativamente mejores en las pruebas de aprendizaje y memoria.

Las células se han insertado en el hipocampo, el centro de memoria principal, y una vez en el cerebro de los ratones ya han comenzado a conectarse en respuesta a las direcciones químicas del cerebro. Zhang explicó en una entrevista con el portal de noticias de la Universidad de Wisconsin-Madison que el proceso es similar a quitar los cables telefónicos y que una vez que se encuentra el camino correcto, se pueden hacer las conexiones correctas.

Observaciones

El investigador también explica que este estudio permitió a los científicos observar cómo reacciona el material trasplantado para prevenir la formación de células cancerosas en ratones. Parte del proceso consistía en garantizar que todas las estructuras celulares trasplantadas se volvieran neuronales, lo que, según Zhang, significa que la ciencia podrá utilizar el mismo procedimiento en el futuro en otros tipos de terapia.

La reparación del cerebro a través del trasplante de células es un gran paso en el campo científico. En el caso de esta investigación con ratones, se estimularon las neuronas colinérgicas involucradas en enfermedades como el Alzheimer y el Síndrome de Down, así como las neuronas GABA relacionadas con trastornos como la esquizofrenia, la epilepsia, la depresión y la dependencia química.